Mantenimiento de la horquilla
La suspensión es uno de los elementos de nuestra bicicleta que requiere mayor mimo si queremos conseguir un funcionamiento suave y de primera. Es por ello que hemos pensado que un manual de mantenimiento de la horquilla puede seros de gran ayuda. Vamos a ello!
La suspensión es uno de los elementos de nuestra bicicleta que requiere mayor mimo si queremos conseguir un funcionamiento suave y de primera. Es por ello que hemos pensado que un manual de mantenimiento de la horquilla puede seros de gran ayuda. Vamos a ello!
1. La válvula y la bomba
Antes que nada, debemos encontrar la válvula de aire para ajustar la pre-carga, que en la mayoría de horquillas está en la parte superior. Una vez encontrada la válvula, tendremos que roscar la bomba de suspensiones hasta el fondo, a mano. Importante: este proceso no se debe hacer con un compresor o una bomba de taller, pues podría causar daños importantes. Hay bombas de alta presión, específicas para dicha función.
Antes que nada, debemos encontrar la válvula de aire para ajustar la pre-carga, que en la mayoría de horquillas está en la parte superior. Una vez encontrada la válvula, tendremos que roscar la bomba de suspensiones hasta el fondo, a mano. Importante: este proceso no se debe hacer con un compresor o una bomba de taller, pues podría causar daños importantes. Hay bombas de alta presión, específicas para dicha función.
2. La presión
Así, añadimos la presión que consideremos necesaria para tener el “pre-hundimiento” adecuado. El botón de descarga, que conviene no tapar mientras roscamos la bomba de suspensiones, servirá para corregir, como cuando hinchamos las ruedas del coche en una gasolinera, para entendernos.
Así, añadimos la presión que consideremos necesaria para tener el “pre-hundimiento” adecuado. El botón de descarga, que conviene no tapar mientras roscamos la bomba de suspensiones, servirá para corregir, como cuando hinchamos las ruedas del coche en una gasolinera, para entendernos.
3. La limpieza y el engrase
Es importante también el mantenimiento de las barras y los guardapolvos, especialmente las primeras, porque sufren una fricción constante. Para ello, debemos engrasarlas. Podemos usar el mismo aceite de suspensiones de la horquilla, o aceite con Teflón. Cuidado, sin embargo, con dejar demasiado aceite, pues puede resultar contraproducente ya que empezaría a atrapar la suciedad. Por ello, para mayor comodidad recomendamos usar productos específicos para esta tarea.
Es importante también el mantenimiento de las barras y los guardapolvos, especialmente las primeras, porque sufren una fricción constante. Para ello, debemos engrasarlas. Podemos usar el mismo aceite de suspensiones de la horquilla, o aceite con Teflón. Cuidado, sin embargo, con dejar demasiado aceite, pues puede resultar contraproducente ya que empezaría a atrapar la suciedad. Por ello, para mayor comodidad recomendamos usar productos específicos para esta tarea.
4. La plataforma y el rebote
La plataforma de pedaleo se activa con un dial que acostumbra a ser de color azul. Por otro lado, otro dial, de color rojo o dorado, se encarga de regular el rebote, y está en la parte inferior de la botella.
Un consejo: echando un vistazo a la horquilla de vuestra bicicleta, es probable que encontréis una tabla de presiones recomendadas. Esta tabla determina cuánta presión necesitamos en función de nuestro peso. No dejéis de comprobar estas medidas, sobretodo en vuestros primeros mantenimientos, ya que como guía os será de gran ayuda.
La plataforma de pedaleo se activa con un dial que acostumbra a ser de color azul. Por otro lado, otro dial, de color rojo o dorado, se encarga de regular el rebote, y está en la parte inferior de la botella.
Un consejo: echando un vistazo a la horquilla de vuestra bicicleta, es probable que encontréis una tabla de presiones recomendadas. Esta tabla determina cuánta presión necesitamos en función de nuestro peso. No dejéis de comprobar estas medidas, sobretodo en vuestros primeros mantenimientos, ya que como guía os será de gran ayuda.
